La regresión y el empeoramiento no se aceptan. Se viven, a lo sumo, con indignación o con rabia (...). Hay que tener la fuerza de la crítica total, del rechazo, de la denuncia desesperada e inútil.
El que acepta con realismo una transformación que es regresión y degradación no ama al que sufre esa regresión y degradación, o sea a las personas de carne y hueso que lo rodean.
En otras palabras: el deber de los intelectuales habría de consistir en desnudar todas las mentiras que a través de la prensa y sobre todo de la televisión inundan y ahogan ese cuerpo por lo demás inerte que es Italia.
Pier Paolo Pasolini, Cartas Luteranas
Ilustración: Carmen Cuervo
Ilustración: Carmen Cuervo
No hay comentarios:
Publicar un comentario