lunes, 4 de diciembre de 2017

El problema con la desconfianza

«El amor lo cree todo»; porque creerlo todo consiste precisamente en presuponer, aunque no se vea, sí, aun cuando se vea lo contrario, que el amor está, a pesar de todo, presente en el fondo, incluso tratándose de ese que extravió el camino, incluso de ese que se ha corrompido, incluso del que está lleno de odio. Precisamente es la desconfianza la que elimina los cimientos cuando presupone que el amor no está presente; por eso la desconfianza es incapaz de edificar. «El amor lo espera todo»; pero esperarlo todo consiste verdaderamente en presuponer, aunque no se vea, sí, aunque se vea lo contrario, que el amor está, a pesar de todo, presente en el fundamento y que no es posible que no haya de manifestarse, incluso tratándose del extraviado, el desencaminado, incluso del perdido.

Søren Kierkegaard, Las obras del amor


Ilustración: Carmen Cuervo

No hay comentarios:

Publicar un comentario