martes, 25 de febrero de 2025

Cuando se corta la luz pienso en Nietzsche

 

por Daniela Andújar


Cada vez que se corta la luz

pienso en Nietzsche

inclinado sobre el papel

con una pluma, tinta y velas

hirviendo con las ideas que van a poner a sus occidentales cristianos

patas arriba, hasta el día de hoy

¡y con el frío que hacía!

¡ y alumbrándose con velas!

¿A partir de qué hora

habría que encenderlas?

Ya sé, amigas mías,

podemos decir que no las encendía él

sino su criada

que además, las fabricaba,

le calentaba la casa,

cortaba la leña

llamaba al deshollinador

después de ir a buscarlo a pie

con zapatos nunca buenos ni abrigados

que eso le provocaría artritis aguda a joven edad

y que ya vieja seguiría buscando el cebo de los animales

subiendo las escaleras

para encender los candelabros

con peligro de caerse a cada rato

que no sabemos por qué estaba tan orgullosa de su vida

o tendría el pecho hinchado de rabietas

y cómo haría cuando menstruaba

qué se pondría

entendería Nietzsche estas cosas…?

como sea,

cuando se corta la luz pienso en Nietzsche

escribiendo a la luz de las velas

algo que por su puesto también vuelve más propicio el pensamiento,

la sal de la vida,

y hasta hace que lo amargo se vuelva claro

y el amanecer muy bienvenido

pienso en Nietzsche

y pienso en su criada

feliz y resentida

jueves, 20 de febrero de 2025

Brújula

por Daniela Andújar


a lo mejor sí, 

perdí el norte. 

me mudé al centro. 

vivo allí. 

¿saben…?, el norte también es algo viscoso, mutante 

diría fatal 

si no dijese 

que el norte 

fue arrasado 

por un fuego 

que prendí yo misma. 

o mejor dicho, 

el fuego que no me decidí a pagar